Todo en cuanto nos rodea está lleno de decisiones & nosotros debemos de elegir la que pensamos que es más acertada, pero... ¿Qué hacer cuando debes de tomar una decisión importante? Sabes que si cometes un error sera difícil enmendarlo, te sientes confundida, indecisa, insegura & muchos más adjetivos. Sabes que el tiempo se agota debes de elegir ya, rondas el tema hora tras hora pero sin ningún resultado, pides consejo para sacarte de dudas, escuchas lo que otros dicen, lo razonas & empiezas a sentir la respuesta & a sacar conclusiones, pero cuando vas a dar el paso de tomar una decisión, te paras, piensas & te das cuenta de que esas personas no son tú, no recibirán las consecuencias de esa gran elección, solo opinaron ante una pregunta... & de nuevo vuelves al punto de partida, igual de confundida e insegura, como si no allases ninguna pista para elegir de una vez por todos. Eso es a lo que se le llama, estar realmente perdida. Pero tras días de continuo pesar, llegas a la conclusión del que no arriesga no gana, sabes que te puedes equivocar, o tal vez no, pero lo que es seguro es que as demostrado que te ha costado elegir entre todas esas opciones, te repites hacia tus adentros que tu puedes, eres capaz, si as sido capaz de provocar una situación complicada en la cual te pone en el compromiso de elegir, sabes que eres suficientemente capaz también de tomar una decisión correcta & verificarla. Cuando ya elegido... Solo queda esperar si as echo bien, o te acabaras arrepintiendo por aquello, lo cual es un riesgo que deberías de haber tenido en cuenta cuando decidiste.
